ATE: un plan de lucha sin plan

ATE provincia ha concluido el “plan de lucha” lanzado desde el mes de agosto. El plan consistió en 11 medidas de fuerza constituidas por paros de 24 o 48 horas y luego “jornadas de protesta”.

Con un nuevo paro de 24 horas programado para diciembre, ha tomado la decisión de cerrar el año.

Para la dirección del gremio, el saldo fue positivo, pues “se consiguió el blanqueo y equiparación de Urpes” y permitió que se avance en reclamos sectoriales.

Pero veamos los resultados: en primer lugar, para este “plan de lucha” hubo una negativa contundente por parte de la directiva a fijarle un monto al reclamo.

En términos reales, ¿qué aumento hemos conseguido luego de tres meses de paros? La equiparación de Urpes sólo afecta a los auxiliares de Educación que recibirán unos 195 pesos más, y una suma parecida para los trabajadores de hospitales. Para el grueso de los estatales no hay aumento real de salarios, sino un blanqueo de una parte de los adicionales, que tampoco pasarán al básico.

No se reabrió la paritaria general y, al fin, cerramos el 2009 como lo planificó el gobierno de Scioli, “sin aumentos para el 2009”.

¿”Avances sectoriales”? Si algo tiene claro el gobernador Scioli es que debe evitar cualquier avance en los reclamos de conjunto de todos los trabajadores del Estado. La propuesta de realizar paritarias por sector ha partido de la mismísima casa de gobierno.

Los “avances” que se adjudica la directiva, en realidad, son mérito de la base del gremio. Los estatales, ante la impasse de los gremios de la CGT y la poca contundencia de las medidas de ATE, comenzaron a organizarse por repartición, realizando asambleas, paros y cortes de calles. En varios lugares ha rendido sus frutos, con aumentos de salarios y blanqueos de sumas en negro.

La dirección de ATE también ha sacado la conclusión de que la fuerza y contundencia de las medidas conquistó que se plieguen los demás gremios de la CTA, y avanzó con reuniones en común de los gremios de la Fegepba (Federación de gremios estatales en la CGT).

Algo de cierto tiene esa aseveración. Pero precisamente por ello, es que el plan debía haberse endurecido en vez de pasar de paros de 48 horas a “jornadas de protesta”. Un plan de lucha para ganar es no aflojar hasta conquistar un objetivo, que es lo que ATE deliberadamente se negó a precisar.

Tribuna Estatal, Lista Violeta tiene una gran tarea por delante. Preparar una enorme campaña, para reclamar a todos los gremios un plan unitario, organizando a lo mejor del activismo para arrancar un verdadero plan de lucha que conquiste el aumento de 600 pesos de emergencia al básico y el fin de la precarización laboral en la provincia de Buenos Aires.